Lachassinne et al. realizaron un estudio transversal de los niños y el personal de 22 guarderías en Francia del 15 de marzo al 9 de mayo de 2020, para evaluar la seroprevalencia del SRAS-CoV-2 en los centros que permanecieron abiertos únicamente para los hijos de los trabajadores esenciales durante el cierre. Los autores utilizaron un inmunoensayo cromatográfico rápido en sangre total capilar para determinar la prevalencia de IgG o IgM. Se analizaron un total de 327 niños, 197 empleados y 164 empleados de comparación (los que se quedaron en casa durante el cierre). Se encontraron anticuerpos en el 3,7% (IC 95%: 1,3-6,8) de los niños y en el 6,8% (IC 95%: 3,2-11,5) del personal. El grupo de control tenía una seroprevalencia del 5,0% (IC del 95%: 1,6-9,8). Estos resultados se interpretaron como que había bajos niveles de seroprevalencia en los niños pequeños y que lo más probable es que la transmisión del COVID-19 a los niños se produjera en casa y no en una guardería.